La idea del millón
Hablar de Xocolat & More es traer al presente una historia de reinvención, superación y mucha constancia. Es hablar del amor que profesa su creadora hacia la pastelería, pero con un ingrediente extra y muy especial, y es el del sentido social. El foco más grande de su emprendimiento está en cuidar a sus clientes bajo un factor nutricional, que en otras palabras se traduce en darle la oportunidad a los diabéticos, celíacos, y en general, a cualquiera que quiera probar una alternativa saludable, de comerse un postre, celebrar con una torta y/o deleitarse con un antojito dulce sin restricción alguna. Esta es la historia de Jenny Camacho, y su amado Xocolat & More.Jenny Camacho, y su exitosa marca Xocolat & More
Pasión por la profesión
Jenny es una emprendedora venezolana, casada con colombiano, y quien llegó al país para abrir el espectro de lo que se considera como pastelería saludable. Curiosamente, y denotando ese don y carisma especial que la rodea, creó sus sedes bajo nombres representativos, pues cada uno ha marcado alguna etapa especial de su vida.
Por ejemplo, la primer sede está denominada como “bebé”; éste, su primer local, fue concebido justamente como su nombre lo indica, ya que fue el primero que abrió, y con el cual expuso por vez primera su talento y una propuesta innovadora para un público que limitaba sus opciones a una oferta muy reducida de productos similares libres de azúcar.
“Cuando empecé, la sede bebé medía 40 metros. Durante la pandemia, y gracias al auge del negocio, logramos movernos a la esquina de la misma cuadra en donde tenemos tres veces más espacio”, argumenta la pastelera al referirse a su punto de venta ubicado en la localidad de Usaquén.
Tiempo despúes, vino uno de los puntos de mayor carga emocional. Se trata de “sanación”, un lugar ubicado en la exclusiva zona del Virrey, al norte de Bogotá, y desde donde Jenny continuó trabajando arduamente a pesar de ser diagnosticada con cáncer de mama. Su propósito, según ella, fue el de “Seguir brindando, a pesar de las circunstancias, salud a través de los postres”.
Estando allí, y tras batallar un duro proceso interno, se dio la oportunidad de abrir en 2019 un nuevo local, esta vez ubicado en la prestigiosa y muy popular Zona G de la capital. A este lugar lo llamó “evolución” y es la representación del crecimiento como tal de una empresa construida y forjada por el conocimiento, la empatía y el talento hecho producto.
Sin embargo, la proyección de Xocolat & More va mucho más allá puesto que además de sus tres puntos de venta cuenta con un robusto e-commerce, que opera desde su página web, y donde atiende clientela en varios puntos de Bogotá con el valor agregado de pedir sin salir de casa.
Educación para el progreso
Meses antes de iniciar pandemia, y viendo los excelentes resultados que estaba trayendo una propuesta de postres sin azúcar, Jenny decidió compartir su conocimiento mediante la creación de un programa al cual denominó “Salud hecha postre”; un espacio para que mujeres de todas partes del mundo, y de manera online, pudieran aprender más sobre esta iniciativa.
“Tengo un club privado lleno de videos en Facebook. Actualmente contamos con 4.500 alumnas a nivel internacional, en más de 80 países. Estamos en casi toda Latinoamérica, además de estudiantes en Francia, Suiza, e incluso en los países árabes. Ciertamente, Xocolat es eso: una pastelería, restaurante, con un pequeño mercado saludable en donde ofrecemos productos de calidad honestos. Donde mi cliente más importante, aunque todos son importantes, son los diabéticos, las personas que tienen intolerancias, que tienen alergias y las personas con cáncer. Yo pasé por ese proceso y sé lo importante que es poder llegar a un sitio donde realmente te brinden un producto que te puedas comer; sin azúcar, sin gluten, sin lácteos”, afirma Jenny.
Y es que el tema de Jenny con el azúcar no es algo nuevo, ni tampoco una cuestión de moda o de tendencias. Desde siempre se ha considerado amante del chocolate, sin embargo a medida que pasaba el tiempo, se dio cuenta que el azúcar no era una opción saludable ni para ella, ni para su círculo social inmediato.
Poco a poco, su familia le mostró el camino que debía seguir pues su papá resultó diabético, su esposo sufrió de triglicéridos y colesterol, y su hijo, de 18 años, padeció durante 6 años de obesidad. De esta forma, la necesidad de aportarle con sus productos a su propia familia, la impulsó a buscar alternativas y descubrir el mágico mundo de la pastelería saludable.
Sin embargo, el camino no ha sido del todo fácil, pues un pastelero que esté inmerso en este concepto orgánico tiene que enfrentarse a diario con los precios cambiantes de productos como la harina de almendras y la stevia pura, por nombrar algunos. De todas maneras, y aunque lo costos casi siempre están alza, en Xocolat & More se protege al consumidor, de tal manera que cuando se compre una torta o un postre este tipo de percances no afecte al cliente final.
¿Productos tradicionales?
Aunque muchos de los visitantes de sus locales preguntan por productos tradicionales, al tener la falsa concepción que el tipo de pastelería que ofrece Jenny es insipida al no tener azúcar, la respuesta de la emprendedora siempre será un rotundo ¡no!
“No manejo líneas tradicionales. No trabajo con azúcar, bajo ningún concepto, ni con harina de trigo. En mis cocinas no existen esos ingredientes. ¿Por qué? Porque pienso que el azúcar es dañino, es inflamatorio, al igual que el gluten. Las harinas de trigo están genéticamente modificadas, hacen muchísimo daño, sobre todo en esta época de pandemia. Es claro que inflaman muchísimo al cuerpo y pues esas son cosas que no vemos sino transcurrido un tiempo. De ahí, que las personas mayores son las que más sufren y las que más padecen de ciertas cosas. Si analizas, las personas que han estado en UCI, o son diabéticas o son obesas, o tienen triglicéridos y colesterol alto. Justamente ese tipo de afecciones son a las que quiero aportar con mi granito de arena”, afirma.
Y es que en Latinoamérica siempre ha estado la cultura de celebrar en torno a una torta o un postre para conmemorar un cumpleaños, un grado, un matrimonio o un aniversario. Al estar siempre el dulce presente, es muy difícil que las personas se resistan a ese “antojito”, por lo que la propuesta de Xocolat & More está basada justamente en eso, en promover el consumo de productos hechos con ingredientes naturales como harina de almendras, harina de arroz, huevos orgánicos, chocolate al 100% de Tumaco, entre otros.
La oferta de Xocolat
Quien vaya a un Xocolat & More encontrará un portafolio compuesto por ponqués, tortas de vainilla, de chocolate, tres leches así como una línea de cheesecakes. Pero, si hay un producto exclusivo y que es parte del ADN del negocio, es el chocolate; los hay con almendras, con uvas pasas, arándanos, así como bombones rellenos de frutos secos, eso si, todo libre de azúcar. Así mismo, se ofrecen galletas, alfajores rellenos de arequipe con leche de almendras, leche deslactosada y/o con leche de almendras. Ideales para personas intolerantes a la lactosa.
Además de lo anterior, y pensando en generar momentos de consumo durante todo el día, quien quiera una opción de sal podrá escoger entre ensaladas, sandwiches, arepas rellenas (recomendadas) y desayunos.
“Si vas un restaurante normal no encontrarás desayuno después de las 10:00 u 11:00 am. Aquí no, en Xocolat, los clientes que quieren comerse unos huevitos con pan a las 6 de la tarde, pueden hacerlo”.
No obstante, si hay dos productos estrella y que tienen fanaticada propia, sin dudarlo apuntaríamos hacia la torta doble chocolate y la torta Matilda. La diferencia entre una y otra es que una está hecha con harina de coco al 100% y la ganache está compuesta por leche de almendras, mientras que la otra tiene harina de almendras, harina de arroz y una ganache de leche de coco y chocolate.
Así que ya lo sabe, si usted quiere encontrar inspiración en un lugar bonito, bien adecuado y con una propuesta completamente diferente a lo que se conoce como pastelería tradicional, Xocolat & More ese ese lugar que usted, amigo lector, debe visitar. Por lo pronto, los planes de Jenny están enfocados en abrir un cuarto punto de venta en Bogotá, y por qué no, dar un paso hacia al conquista internacional y consolidar su marca en una ciudad como Miami.
“La gente piensa que somos la mega compañía, pero la realidad es que soy yo solita. No tengo socios. Mi esposo me acompaña muchísimo, pero no es lo suyo. La época de Covid me ha enseñado a ser más fuerte como empresaria, porque ya no me considero emprendedora, creo que dejé de serlo hace rato. Soy empresaria. Espero seguir con lo mío, con lo que me gusta; dar clases, crecer en el número de alumnas, que lleguemos a, no sé, 100.000 estudiantes a nivel internacional. Que la gente sepa que sí se puede salir adelante haciendo postres deliciosos sin tener que recurrir al azúcar y al gluten”, finaliza la empresaria.
