El desarrollo acelerado de la tecnología ha hecho que la gente en poco tiempo se sature de la cantidad de información que encuentra en internet y aunque el consumidor está más enterado, también puede estar confundido, porque en medio de ese diluvio informacional, hay de todo. ¿Cómo aprovechar la Era Digital para entregarle al consumidor lo que espera encontrar?
La persona que habló de este tema en el marco de la XXXIII Asamblea de ALIM fue Guillermo Oliveto
Lic en Administración de Empresas de la Universidad de Buenos Aires Argentina y Socio fundador de “W”, consultora especializada en el análisis de las tendencias humanas, sociales, políticas, económicas y de consumo, para su aplicación en el pensamiento estratégico y en el desarrollo de negocio.
“Hoy quiero referirme brevemente a un tema muy importante para el sector, lo que piensa, lo que dice y lo que hará el consumidor acerca de todos los esfuerzos que se hacen para que toda la cadena de valor tenga el nivel de seguridad que hoy se requiere en medio del mundo tan convulsionado y así entender qué están mirando los consumidores y qué oportunidades hay para la región y cómo podemos incluso imaginar lo que será Latinoamérica en unos años”.
Uno de los conceptos que se desarrolló en la guerra del Golfo fue el VUCA el cual se trasladó para el ámbito de los negocios, las empresas, las cadenas de valor, de la producción y por supuesto de la vida en sociedad. ¿Qué es un mundo VUCA? Es un acróstico que está en inglés, y habla de un mundo volátil, incierto, complejo y ambiguo, por lo tanto considero que tendremos todos que aprender a mirar con nuestro nivel de sutileza, con nuestro nivel de lucidez, que es lo que va sucediendo en cada uno de los contextos, con este concepto. Este es el segundo punto que quiero que tengan en cuenta porque el VUCA tiende a profundizarse.
El siguiente elemento lo traigo del último congreso mundial de investigación de mercados, todos sabemos que hay un tópico muy fuerte, y es que estamos viviendo en la era digital y por lo tanto de Big Data, es decir, tenemos cada vez más información, cada vez más acceso a múltiples elementos que nos permiten entender qué es lo que está sucediendo, sin embargo de allí emerge el nuevo paradigma, y es Smart Data, o sea de toda la información que podemos encontrar, ¿Cuál es la que vale la pena?
Las oportunidades de los mercados
Hoy somos 7.100 millones de habitantes en el mundo y según estimaciones de la ONU para el 2.020 se pronostica que la cifra aumente a 7.500 millones y para 2050 la cifra habrá aumentado a 9.000 millones y lo primero que va a tener que hacer toda esa gente es comer, los demás artículos de consumo no hay que perderlos de vista, pero la revolución demográfica favorece a la industria de alimentos y en primera instancia a la industria de alimentos básicos, el tiempo dirá qué nivel de sofisticación se le podrá agregar, en función del crecimiento que haya del poder adquisitivo.
Hagamos una relación sencilla para dimensionar cómo el crecimiento demográfico le da una posibilidad al sector alimenticio de expandirse:
En China hay un elemento central vinculado con el mundo de los alimentos y es que este país ya tiene 300 millones de habitantes de clase media y se prevé que para el 2.020, o sea dentro de nada, sean 600 millones, estamos hablando entonces del que sería el mayor centro de consumo del mundo, prácticamente de cualquier cosa.
Hoy China es el quinto mercado del mundo en consumo interno de vinos, estamos hablando de casi 17 millones de hectolitros anuales. ¿Saben cuánto es el consumo per cápita? 1,2 litros, prácticamente nada, Argentina tiene 25 litros per cápita, imagínense que eso creciera solo al doble, ya sería un mercado más grande que el de Francia por ejemplo o que el de Estados unidos que es uno de los mayores consumidores de vino en el mundo.
Por otro lado, veamos donde están naciendo los niños del mundo, 4% en Estados unidos, 5% en Europa, ½% en Oceanía, 57% nacen en Asia y esa es una estadística del 2010, 26% en África y 8% en Latinoamérica.
Durante el último año países como Uruguay, Paraguay, han presentado crecimientos importantes en sus economías, Brasil, actualmente está con una situación compleja de recesión, pero que de todas maneras ha sido sin duda uno de los motores de de crecimiento de la región junto con México.
Entonces por un lado vienen economías más grandes con menor tasa de desempleo con consumidores con mayor poder adquisitivo, lo que significa que podrán comer mejor y comer más; además comer más sano, y también pueden subirse a las tendencias mundiales.
Latinoamérica tiene casi 300 millones de habitantes de un alto poder adquisitivo, de un razonable poder adquisitivo sobre todo para poder comer productos vinculados con las harinas, desde el pan hasta las galletitas, los fideos, etcétera. El mercado de la harina es cada vez más atractivo y cada vez más potente.
¿Entonces qué buscan los consumidores?
Que los ayudemos a navegar el caos del mundo VUCA ¿Qué significa eso?
Primero entender al consumidor, es decir saber lo que le pasa, entender que tiene mucha información en la cabeza, por lo tanto no necesita que lo confundan más, sino que cada vez sea más fácil para él entender lo que necesita, entonces se hace necesario simplificar, ser más concretos, ser más claros.
En segundo hay que contarle por qué le sirve un alimento o porque no de manera sencilla, la claridad genera confianza y eso es algo que los consumidores están buscando.
El consumidor espera de las empresas, que le den un valor adicional como por ejemplo que lo inspire, lo convoque, lo nutra en todos los sentidos. Esta es una demanda también creciente hacia las compañías y hacia los negocios.
El consumidor ha evolucionado, ha cambiado de tal manera en la Era Digital que está marcando un nuevo derrotero para la empresas, está planteando nuevos retos en materia alimentaria, las nuevas tendencias están en la mesa y Latinoamérica es una mercado en el cual es posible cumplir con esas expectativas, lo importante es que la región sepa aprovecharlas la oportunidades y ojalá de la mejor manera posible.